Un pirata anda suelto en Málaga

Jejeje, pues eso, que hace un poco acabo de llegar de darme una vuelta por Málaga. Me lo he pasado de miedo y bueno a veces ocurren cosas y aparecen anécdotas de la nada, cosas que sólo pueden pasar allí.
Cuando llegué no tardaron mucho en aparecer por allí Mayka (Hola Guapa) y Don Mendo(Bien majo que es) y nos fimos hacia el centro donde se nos unió Rocio (Ole el salero). Calles llenas de gente, llenas de música, el alcohol parece que fluye de las calles, gente por todos sitios, bailes, empujones pero todo con un buen rollo increíble. Cuando ya cortaron la música nos fuimos de garitos, incluido uno donde Mayka y Rocío parecen las jefas, ahí se hace lo que ellas dicen. También la anecdota de otro garito cuando fui al servicio. En la cola de éste pues... bueno... se hacen amistades y terminas haciendote una foto con dos malagueñas que automaticamente te bautizan como el calvo de Toledo.
Recuperamos fuerzas cenando en un restaurante turco cerquita ya del recinto ferial y para allá vamos, en ese momento se nos une Sabejal (hola resalá)y llamamos por teléfono al gran ausente (por motivos familiares) Carlos. Allí empezamos a movernos entre las casetas, eso sí, sólo una copa en cada una que sino... Allí baile, risas, fotos... al final nos rajamos de subirnos en el tirachinas (May, otro día si que nos tenemos que subir) y así toda la noche hasta que por fin nos sentamos en unas mesas a comer un poquito y a hablar, a contarnos cada uno un poco de nuestras vidas. Noche genial como pocas con una compañía la mar de agradable lástima que empezara a salir el sol.
Al siguiente día al principio pensaba dedicarlo a ver Málaga, lo juro. Pero... bueno... al pasar por la plaza la Merced me metí en uno de los bares de allí a tomarme una cerveza y cuando me la estaba terminando aparecieron cuatro "individuos" que hacía 11 años que no se veían entre ellos. No se como lo hice pero el caso es que empezamos de copas y terminé con ellos en Torremolinos. Vaya noche loca de esas que no sabes como ha sido pero que acabas de conocer a cuatro amigos más.
Luego de vuelta al hotel en un taxi conducido por una guapa taxista, encantadora. En el trayecto nos dió tiempo a contarnos un poquito de nosostros, tanto que al final me dió su número de taxi para cuando volviera a Torremolinos, lástima que no pudiera llegar a tiempo a Málaga a volver a ver a Mayka.
Luego ya cuando me desperté pagué la cuenta del hotel, me despedí con un par de besos de la chica de la cafetería (guapísima) y vuelta a Toledo a dormir un poco.
Decir por último un par de cosas: ¡GRACIAS MÁLAGA! y... todas las malagueñas son guapísimas. He dicho.

Eduardo

PD: Por cierto, Volveré este mismo mes, me han invitado a un cumpleaños y siempre cumplo.