Einige Bilder von Berlin

Todos somos Privateer

Alucinando estoy con lo que le ha pasado a Privateer. Todo por reflejar en su blog a un espécimen que tanto abunda por este nuestro mundo: El señor tengo un morro que me lo piso.

A la vista de esto que nadie se extrañe que cada vez los informáticos sean más reacios a "prestar" sus servicios fuera de sus horas de trabajo.

Si ya no es suficiente que te tengas que tragar marrones de cualquiera a cualquier hora, ser adivino y encima no cobrar por ello o cobrar ocho meses más tarde... encima que tengas que sufrir las amenazas por parte de "aprovechao" con un taco de billar en la mano.

Esto de escribir en un blog está empezando a ser peligroso, a este paso hasta poner un "post" sobre Heidi puede desencadenar una hecatombe.

Y a ti Privateer, mucho ánimo y sobre todo recuerda que existen los cuartelillos de la Guardia Civil.

Realidad

Hay un viejo dicho: No es más feliz el que más tiene sino el que menos necesita. Parece sencillo. El problema se presenta cuando lo has tenido y lo pierdes. En los tiempos que corren me da en la nariz que para intentar ser felices tendremos que redefinir nuestras necesidades. Volver al punto cero de nuestra vida y aceptar de buen grado lo que nos caiga.

Pero yo prefiero otro dicho mejor que el anterior: No te hagas ilusiones, así no saldrás decepcionado. ¿Conformismo? Creo que no, más bien aceptar la realidad tal como es.

Hoy por ejemplo ha ocurrido una de esas cosas que te "caen" y la aceptas como una bendición, me sale a devolver la renta.