viernes, diciembre 16, 2005

The Golf Cafe


Hola:

¿Que de donde vengo? Fácil de The Golf Cafe, en Añover mi pueblo natal. Hacía tiempo que no tenía el honor de traspasar sus puertas, pero hoy... bueno, por que no.
Pasas al local, decorado con todo los utensilios de deportes ingleses tales como golf, polo, hockey... Ambiente relajado, música de jazz, paredes de madera, humo en el ambiente, cerveza y... Luis. El responsable de semejante paraíso en el centro de la provincia de Toledo.
Con la sabiduría que da el saber estar detrás de una barra me pregunta:

L: Edu, que tal ¿Cuanto tiempo no?
E: Si, ya ves chico, de vuelta.
L: Bien, veo que estais viviendo otra vez aquí.
E: No, Luis, solo soy yo el que vive aqui, estoy soltero de nuevo.
L: Pero... ¿Estas bien no?
E: Hombre, ahora sí, gracias a varios amigos, si.
L: Pues ahora a vivir.

Gran sabiduría, la que dan las clases de filosofía de barra en las cuales Luis es un maestro. Y allí hemos estado, arreglando un poco el mundo entre cerveza, humo y música de jazz.

Si algún día el camino os deja allí, decid que vais de mi parte, sereis uno más de la familia.

Luis, acabo de destapar la penúltima cerveza esta noche. A tu salud.

Eduardo

10 comentarios:

Flu dijo...

Ta, ta, ta, yo aquí, preocupada por tí y tú de bares...

Vale, vale...

Guillermo dijo...

Que sabios son los barman.
Me apunto el nombre del sitio, nunca sabes a donde te llevará el camino.

Acabo de destapar la penultima, muy bien dicho jeje

Anónimo dijo...

Si alguna vez el camino me deja allí lo más probable es que yo quisiera ir a Vigo.

Anónimo dijo...

Cuando vaya a Toledo ya sabré a quién llamar y a dónde ir.

La sabiduría del barman sólo se consigue después de haber conocido y visto una cantidad considerable de gente lo más variopinta. Hasta aquí, cualquier viajero empedernido con aires de mimetismo podría haber adquirido esa experiencia. Pero el barman cuenta con algo más. La gente que ha conocido muchas veces se ha mostrado sincera y con el alma abierta a causa del alcohol.

reve dijo...

Pues ya sabes: a vivir.
No puedo ser más seria por que el comentario de Eride ha acabado conmigo...

Anónimo dijo...

La verdad es que el sitio pinta bien,Ambiente relajado, música de jazz, paredes de madera, humo en el ambiente, cerveza.. de esos en los que te invitan a sumergirte en conversaciones interminables.
Y el barman una joya.
Un besazo!

Gacela dijo...

Los lugares en los que te sientes tan a gusto que dejas que el tiempo pase, y la companyía es agradable, las horas vuelan y sigues sientiéndote como en casa... qué gozada :-)

Anónimo dijo...

Eso a disfrutar de la buena música y la conversación, pero ¿no era que tu no bebias?

Saludos a todos

terminus dijo...

-Flu, ¡No! Cuidado que eso hace dano. ¡CLONK!
-Guillermo, Vacio, cuando querais.
-Eride, pues cuando puedas pon rumbo a Vigo.
-Reve, viviré. Y no es obligatoria la seriedad.
-Sucubo, el barman merecería una pelicula.
-Gacela, es cierto, es como en casa.
-Cdaae, no te asustes, solo fueron un par de cervezas, por la ocasión. Alguna más o algo mas fuerte y me pongo malo. Acostumbro a tomarlas sin alcohol.

Wardog dijo...

La cerveza es lubricante conversacional. A veces necesitas el zumito de cebada para poder entablar esa conversación difícil.
O cuántas veces hemos llegado a un bar donde nos esperan y lo primero que nos dicen es "pilla una cerveza y vente que te explicamos"...
Y si es en bares como ese, mejor que mejor. Me gusta el sitio, me gusta...