No es Mordor

Hola:
Ultimando detalles para ir desde la Tierra Media hasta el destino final para el anillo. Emulando a Tolkien os dejo la ruta a seguir.


Vamos que no estoy tan mal de la cabeza como Frodo. Prefiero el Levante al Monte de Destino. Eso si me han dicho que tendré que subir escaleras, sin miedo, ahora hago deporte.

Editando que es gerundio: Hago una llamada a los amables organizadores de mi viaje a Levante. ¿Sería posible escuchar música? Pues eso, que me apetece ir un poco de marcha.


Eduardo

Despertar

Quiero despertar
Sentir el frío de la mañana
No quiero dormir
Tan solo soñar

Entraste sin avisar
Te colaste en mi mente
Sueño con tu rostro
Siempre... cuando amanece

Juntando el ocaso con el alba
Soñando despierto
No quiero abandonar...
Nunca este sueño

Eduardo

PD: Si, ya lo sé, tengo que dejar de tomar tanto café.

La bañera

Hola:
Lo prometido es deuda. Y siguiendo el recorrido turistico por mi piso os presento a la bañera.

Esto es más normal

Por cierto, es dos plazas

Eduardo

27 de enero de 2006

Cuanto tiempo, verdad. Hacía años que no nos veíamos. La conversación que hemos tenido se parecía bastante a esto:


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Espero que no tardemos tantos años en volvernos a ver

... Yo sigo con mis canciones
Y tu sigue con tus sueños...

Eduardo

Carnaval

Se acerca el carnaval, ya falta poco. Llega la época del año que todos nos quitamos la máscara. Sí, habéis entendido bien, durante el resto del año todos vamos disfradados de persona normal, haciendo siempre lo correcto, siendo respetables, al menos la gran mayoría.
Pero en el carnaval por unos días nos está permitido cumplir parte de nuestros sueños. Por un poco de tiempo seremos piratas, princesas, monstruos, soldados o habitantes del Tirol. Hay mucho donde elegir, que cada uno busque su sitio.
Podremos recorrer las calles vestidos de forma inverosimil y veremos algo ridículos a los que nos miran, vestidos como siempre. ¿Que les pasa? ¿No tienen sueños?
Despegad de la tierra, volad hasta donde dicte vuestra imaginación y después hasta donde nos lleven las corrientes de la esperanza. Volad conmigo.
Ah, por cierto, no os he dicho quien soy. Soy alguien insignificante pero sin mi el Carnaval estaría desnudo.


Soy... El Arlequín.

Eduardo

Una pequeña locura

Hola:
De nuevo aquí. ¿Que me traigo hoy entre manos? Una nueva locura, demasiado tiempo he sido cuerdo. Ahora disfruto como nadie de esas pequeñas locuras que me dan. Reconfortan.
El dia 4 del próximo mes tengo intención de ver el mar. No para bañarme, creo, sino para dar un paseo por la arena y tirar un objeto al agua. No, no es ni el sofá ni la cama, tendría problemas con las autoridades y con mi conciencia. Es algo más pequeño que ha reposado durante los casi tres meses últimos en mi monedero.
Con dicho objeto se irá también otro fantasma, otra parte de mi pasado. Puede parecer como digo una locura y os diréis: Edu se ha vuelto majara del todo, hacer 800 km para tirar un objeto al mar. Sí, puedo parecer "peliculero" pero me apetece hacerlo y de paso despejo la cabeza. Ya se, el chiste fácil es decir que ya la tengo suficientemente despejada. Pero cuando veáis el objeto entenderéis que quizá no es tanta locura, sino algo que debo hacer.

Y ahora os presento al susodicho:

Voy a ser como Frodo ¿A que sí?

Todavía tengo una pequeña marca en el dedo anular de mi mano derecha, pero también está desapareciendo, lentamente pero lo hace. ¿Volverá a haber otro parecido en el mismo sitio? Sinceramente no lo sé, puede que sí o puede que no. Es pronto y el futuro, como siempre, incierto. Si supieramos lo que nos depara perdería el encanto de levantarnos cada día y afrontar los nuevos retos que se nos presentan. A por ellos. Se que no es fácil pero hay que hacerlo.

Eduardo

The Phantom of the Opera

Hola:
Hace no mucho se habló aqui del Fantasma de la Opera. Una obra maestra para mí sobre todo si hablamos de su música. No fué sorpresa que mi querida amiga Cdaae comparta esa misma opinion, ya que tanto su nick como el título de su blog así lo indican. Lo que si me dejó con algo de esa sorpresa fué que dijera que había visto el musical en Londres. Le pedí que lo contara y tuvo a bien hacerlo en su post The Phantom inside in my mind .
No voy a descubriros a estas alturas la obra, pero si quería hablar un poquito del fantasma. Yo veo en él a un genio, a una persona única, sensible, enamorada. No veo a un malvado como a veces gustan de pintarle. Unicamente un ser, que maltratado desde su nacimiento, recluido de por vida e ignorada su genialidad cae en la amargura. Sin nadie que disfrute con el de su obra, enamorado de una mujer que no le corresponde.
Para mí, si Christine sintiera lo mismo por él no elegíria al final a Raoul. No, ella no amaba al fantasma, afecto si, además de miedo mezclado con lástima. Siento no estar de acuero contigo Cdaae, pero así es como yo lo veo. Tampoco soy ningún entendido crítico en la materia, sólo me gusta la música y la trágica historia que cuenta.
De todas formas, como siempre digo, no me hagais mucho caso. Demasiadas veces en mi vida tambien he sentido como él, sin ser un genio claro. Demasiadas veces podria decir "The Phantom inside me".

Eduardo

Pequeñas cosas

Hola:
¿Que tal estaís? Hoy quería decir algo, algo personal en realidad. El título es "pequeñas cosas", esas que nos hacen sonreir de vez en cuando. Esas cositas que nos dan pequeñas ráfagas de felicidad.

La verdad es que soy sencillo, igual que me vengo abajo con facilidad con cualquier cosita me alegro. Una llamada de un amigo, un café especialmente aromático, una melodía en el momento apropiado, una buena lectura, una compañía agradable... Tampoco parece tan raro. Al menos compensa en parte algunas de las incertidumbres y amarguras por las que pasamos.

No es la existencia maravillosa que pensaba que tendría, pero me voy acostumbrando a disfrutar de esas "pequeñas cosas", de esos grandísimos momentos de vuestras vidas que me brindáis desinteresadamente.

Una invitación a cenar, otra al cine, reuniones de amigos en Madrid y Valencia, felicitaciones por mi cumpleaños, correos de gente que ni me conocía ofreciendo ayuda aguantando incluso mis desvaríos, vuestros comentarios en el blog por supuesto. Si hasta descubristeis el otro que no quería que saliera a la luz. Por último, por ahora, me visitais en la ciudad que aunque no vivo en ella considero mi casa (lástima que no pudierais estar todos).

¿Os hace falta algo? Pedidlo, lo haré encantado.

Siempre a vuestra disposición, Eduardo.

La cama

Hola:
Si os gustó el sofá cuando veáis la cama... pues eso, que no tiene desperdicio. A ver, el sofá al mar y la habitación entera ¿Dónde?.
No hace falta decir que duermo en otra habitación, me niego a dormir ni una noche mas ahí.
Otro día os enseño la bañera. Esa si que se queda.

Sí, llamativa si es sí.

Eduardo

El Beso

Baja del avión, ha sido un viaje difícil, no sólo por las dos horas de retraso ni por lo incómodo del vuelo con la tormenta.

Vuelve con fiebre, dolor de cabeza... gripe. Los paseos por aquella ciudad, empapado por la lluvia pasan su factura.

Si algo tiene claro es que tiene que repetir el viaje en mejor disposición si quiere disfrutar algo más. Las ideas se agolpan machacándole la cabeza y el teléfono suena sin cesar, pero no lo contesta, ya sabe quien es y lo que va a decirle. Ya está todo dicho.

Pero al llegar a la sala de espera algo le saca una sonrisa, al menos hay alguien que se alegra de verle.

Ella le ve primero, emprende una carrera pasando por debajo de la cinta. Se tira en sus brazos y le da un interminable beso. Hola Lucía.

Para mi sobrina y ahijada, Lucía.

Eduardo

Otro meme

Siguiendo la amable invitación de mi amigo Guillermo paso a emnumerar cinco de mis manías ¿Sólo puedo cinco? A ver, a ver... hum...

1.- Constantemente estoy moviendo el cuello. Verás el día que cruja que gracia me va a hacer

2.- Conduciendo si voy con alguién o no hablo o hablo poco.

3.- Siempre vuelvo a ver si he cerrado la puerta de casa, a veces en dos ocasiones, por si acaso.

4.- Suelo andar deprisa, si voy con alguien a veces se queda atrás y no me doy cuenta.

5.- Si os cruzais conmigo en el coche no hace falta que saludeis, no os haré ni caso. (si es que no me entero).

Bueno, ya casi que no quedan víctimas. Cdaae perdona pero te tocó.

Eduardo

Edito: Awake resulta que se lo tenía que pasar a dos personas y pensé que ya te lo habian pasado, a si que ahora por hablar te toca. (Y me agacho por si me viene un pescozón)

Pues eso

Hola:























Eduardo

The Golf Cafe - Live is Life

Día:15-01-2006

Hora: 18:00

Lugar: The Golf Café

¿Por qué?: Concierto

Me gusta la música, ya lo sabéis. Tengo casettes, vinilos, cd, mp3… pero nada se puede comparar a la música en vivo, aunque salga de las ganas de un grupo de amigos.

Llego a tomar café y Luis me dice que tocan esta tarde. ¿Hora? A partir de las 5 me dice. Vale, me voy a dormir un poco y luego vuelvo.

Llego, pido una cerveza, los instrumentos están preparados y los músicos en la barra. Queda poco. Suben, el local se prepara, últimos ajustes y empieza la música. Grande, muy grande la sensación de la batería, el bajo, guitarras y teclados en vivo.

Canciones de hace tiempo, todas cargadas de recuerdos. Me voy al final del local, ahí estoy mejor. Veo a la gente, veo al grupo… estoy flotando.

Llega el momento, mi momento. Se escuchan los primeros acordes de “Still Loving You” de Scorpions. Es la primera vez que la oigo interpretada por la voz de una chica. Las guitarras hablan solas parece. Llega el momento del punteo que se me hace eternamente mágico, pero… falta algo. Levanto mi mano izquierda, Luis me ve y me pone en ella una cerveza. Perfecto, ¿Coro de ángeles? Ni en sueños, esto si que es música celestial.

Tarde para no olvidar, saco el móvil para llamar a unos amigos de Madrid para que lo puedan escuchar, no hay cobertura. Bueno, ya se lo contaré. Es lo que estoy haciendo.

Si es verdad que existe un cielo os podéis quedar con mi parte. A mi me vale con disfrutar muchas tardes así en The Golf Café.

A vuestra SaludCon "El Posa" músico y amigo

Eduardo

Cuaderno de bitacora de un galeote

La verdad es que ser galeote no es tan malo después de todo. Sí, darle al remo cuando los vientos son escasos es duro pero está exento de toda responsabilidad.

Elegir la ruta. Eso si que tiene responsabilidad. Cuantas veces he soñado tener la habilidad del capitán o del primer oficial a la hora de leer en las estrellas la posición exacta de la nave en la inmensidad del océano.

Y yo ya soy todo un veterano, llevo tres años en ésta nave. El capitán hasta conoce mi nombre y hago buenas migas con el cocinero, que cuando está de buen humor me suele obsequiar con media ración de pan duro en el rancho.

He conocido a muchos compañeros de remo, algunas veces cuando sopla el viento y nuestros remos están quietos, entablo conversación con el compañero de cadena. No, nuestra conversación no tiene nada de trascendental. Comentamos el poco brío del tercer banco de estribor a la hora de bogar, discutimos sobre la estrategia de la última batalla,... cosas normales de galeotes.

Y lo del vigía, pero como se puede haber nacido para vigía y padecer de vértigo. Ya no quedan buenos profesionales hoy en día. Y mira que es uno de los puestos más codiciados de la nave, te hace sentir superior, siempre por encima del resto de problemas.

Ahora tengo un nuevo empleo, no veo el Sol, pero tampoco disfrutaba mucho de él en la última nave. E incluso he tenido el privilegio de llevar a mi antiguo capitán hacia su último destino, el Reino de Hades.

Ahora seguro que ya sabéis quién soy... ¿No? Seguro que sí. O acaso no habéis oído hablar de Caronte.

Eduardo

La verdad es que quería hacer algo parecido a las introducciones de La Ciudad Invisible, entonces lo tendría que haber terminado así.

Y así seguimos, navegando por la procelosa mar de las ondas hertzianas, buscando la utopía rumbo a la Ciudad Invisible.

The Night

..."la noche no es para mí"...

Así reza el estribillo de una canción del grupo valenciano Video, de allá de los lejanos 80. Cuan equivocado está en mi persona. Acabo de decir a unos buenos amigos que me acostaba. Mentí, pido perdón, soy culpable.

Soy culpable de que me guste la noche. Es tranquila. Puedo hablar a solas con mis fantasmas. Puedo espantar las locuras que me atormentan. En la soledad de la fría noche estoy.

Estoy agusto envuelto en su frío, cuando el agua se congela y paseo por la calle tranquilo, sin nadie que me mire ni me salude. Siempre me he considerado un solitario y me preocupa que me guste. Verdaderos esfuerzos he de hacer para hablar con mas de seis personas a la vez. Por eso me gusta la noche.

Noche fría, amiga fiel, lástima que el amanecer quiebre tu magia. Hoy estoy aquí, mañana te esperaré... como siempre.

Eduardo

Nota: He podido comprobar que estoy como una cabra. Aqui os dejo los enlaces de dos amigas, mas juiciosas que yo, que han abierto blog recientemente y considero que merece la pena visitarlos. Por un lado Cdaae me gusta como defiende sus derechos y siempre tiene una mano dispuesta a ayudar, gran amiga por descontado. Por el otro lo en su Casita de Madera, frescura valenciana en estado puro. Un beso a las dos.

No quiero que vuelvas

Hoy he vuelto a soñar. He soñado que querías volver, que querías volver a meterte en mi cama, tu que ni estando juntos te metías en ella. Pero sabes que... hasta en mis sueños te rechazo.
Tomaste la decisión de irte, pensando que el perrito faldero iría detrás, pero todo se acaba, hasta mi ceguera. Cuando se toma una decisión hay que saber y acatar las consecuencias, espero que esta lección te sirva pues te vas a hartar de ellas.
Me intentas hacer la vida imposible incluso no estando aquí, repartiendo mentiras a todo aquel que no consigue huir a tu paso. Llegas tarde, tengo una vida nueva. No es una vida de sueño pero a mí, después de tantos años a tu lado, me lo parece.
Estoy condenado a pasar el resto de mi vida sólo, eso lo se. Pero prefiero beber las llamas de la más honda sima del infierno a volver contigo.
Asi que, sabes lo que te digo, por primera vez en demasiado tiempo, empiezo a ver que hay otras cosas a parte del trabajo y tus caprichos y sobre todo tu afán por el asqueroso y sucio dinero. Dejame vivir, no quiero que vuelvas jamás.

Eduardo

Me voy a poner cachas

Hola de nuevo:
Primero agradecer a todos vosotros y muy especiamente a todas vosotras las muestras de cariño reflejadas en el post anterior, algunas muy emotivas (tened cuidado, que no soy de piedra). Puedo comprobar que estoy rodeado de excelentes amigos, no os cambiaría por nada.
Pero a lo que vamos, hoy es el primer día de gimnasio. Mi primera sorpresa... la báscula del gimnasio me adora, para medir 1.73m y pesar 92.100kgs la maquinita dice que no soy obeso, solo que tengo sobrepeso (un poco mas y le pido salir al trasto este). Pues nada, ficha de rigor con fotito incluida, pago de la mensualidad y tabla de ejercicios.
Primero bicicleta, amenizado por un paisaje cular que no veas, me tuve que decir: Edu, tranquilo, que la bici no tiene ruedas y por más deprisa que pedalees no la vas a alcanzar. Luego distintos aparatos de tortura... pero curiosamente preveo que esto me va a volver a gustar.
Me duelen músculos que pensaba que ya no estaban ahí y mañana las agujetas serán memorables, pero me hace sentir vivo. Ahora una duchita, me haré unas verduras de cena y a ver que habéis escrito en vuestros blogs.
Lo dicho, me siento francamente bien en el gimnasio. Eso si, se me ha olvidado una cosa imprescindible. En estos sitios hay que ir con ropa "guay", el chandal de baratillo me hace parecer el abuelo, y NO LO SOY. He dicho.

¿Llegaré a ponerme como el buen mozo que era hace tantos años?
Disculpad la calidad, pero la foto tiene 18 años (y no, no me depilo).

Sayonara Babes, Eduardeitor.

Dos amigos

Volvió a su vida después de mucho tiempo. Morena, ojos negros, simpática... friolera y algo despistada… adorable. La misma sensación de siempre al verla, eso no había cambiado, pero algo si había cambiado desde el último encuentro… El.

Después de los saludos de rigor, contarse las últimas experiencias vividas por ambos, tomar un café que se alargó por cerca de cinco horas, dos grandes amigos por fin reían juntos.

Pero casi se encontró con un desconocido con los recuerdos de alguien de su pasado. Le daba casi miedo escuchar sus proyectos futuros, aunque le animara a cumplirlos.

Al día siguiente quedaron a comer en un restaurante italiano. Pasear por las empedradas calles de la ciudad, admirando las esculturas en mazapán de los escaparates. Llovía, los dos guarecidos bajo el mismo paraguas, cualquiera los hubiera confundido con dos enamorados.

Pero… eso es algo que ninguno de los dos se puede permitir. El amor duele demasiado cuando se va, mejor así.

Ella ha vuelto a su exilio voluntario. El se ha quedado de nuevo, pero ya no está solo. Le arropan un montón de amigos.

¿Cómo sabe que hay un montón? Estás leyendo esto, eso ya te convierte en uno de ellos.

El amor es un lujo en manos de unos pocos privilegiados, mi enhorabuena a ellos. Otros… sólo lo hemos visto de lejos.

Eduardo

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El sofa

Hola:

Desde el incidente de la piscina hay en cierta persona un temor por si pongo en remojo el sofá. Es decir ... esto:
La verdad, si lo mirais bien... puede ser bonito, pero práctico para nada. Es incómodo, solo tiene dos plazas(si fuera un coche...), en verano te pegas a el como no ponga el aire acondicionado cercano al punto de congelación, y encima no se puede lavar en la lavadora.
Después de fundir en una nueva persona a Terminus y a Eduardo con gran trabajo de todos vosotros (y de mi psiquiatra particular, si le hubiera valido me pega más de dos pescozones). Después de cambiar toda la ropa, de peinado... estareis de acuerdo que un sofá de este tipo no me pega nada.

He estado mirando por ahí y me he encontrado algo mas funcional y más cómodo, ahora quiero algo como esto. Eso sí, me tendré que llevar a alguién para que eliga el color, por que como lo tenga que eligir yo, vamos listos.

Lo que sí pienso conservar como buen toledano es esto:
¿Qué pensáis ahora? Yo creo que la decisión está clara.

Eduardo, el sofaticida.

2006

Hola:

Llevamos seis dias del 2006 y ya estoy deseando que se acabe. Aparte de los fantasmas de mi pasado reciente... otros más antiguos hacen acto de presencia. Encima me empeño en crear algunos nuevos. Vamos, que mi casa parece ahora un castillo de Transilvania. En fin... es mi destino parece.
He visto en distintos sitios propositos para el 2006, para no ser menos pongo los mios. A ver si al menos se cumple alguno, pero al paso que voy...

- Volver al gimnasio. Mi zona abdominal está llegando antes que yo y eso me fastidia.

- Dejar el tabaco. Después de seis años sin apenas catarlo, yo como un imbécil voy y vuelvo.

- Componer un par de melodías.

- Perder de vista a mis abogados de una vez.

- Comprarme un coche clásico de dos plazas, y sobra una todavía. Bueno, esto casi mejor para el 2007 pero como se ponga a tiro...

- Viajar:
· Tengo reserva para Paris, tengo que cumplir la promesa que le hice a mi mejor y más antigua amiga.
· Volver a Dublín al mes siguiente que vuelva de París. No hace mucho le prometí a alguien que vive allí que le pagaría toda la cerveza que pudiera filtrar (aunque el amablemente me dijo que con un par de rondas bastaría).
· En verano o antes visitar Amsterdan o Viena. O quizá las dos, uno de mis sueños es ver la Opera de Viena (aunque sólo sea la fachada).
· En fines de semana aislados visitar distintos puntos de la geografía peninsular.

Milena me aconsejaste salir. ¿Vale así o me voy más lejos?

- Invitar a cenar a Milena.

En fin... estos son mis propósitos para el 2006. Con cumplir la mitad me conformo.

Eduardo

El Crimen

Estaba a su cargo, de él dependía su bienestar. Era una mujer hermosa, cuidaba de ella sin que tan siquiera se diera cuenta de su presencia.

La acompañaba por la calle, siempre invisible. Apartaba los peligros a su paso, no concebía una existencia distinta, había nacido para ella.

Las noches, arropaba su descanso, velaba por sus sueños, la reconfortaba en las pesadillas que la oscuridad provocaba.

Pero le estaba prohibida. Vedado el hecho de revelarle siquiera su presencia. Y esto le atormentaba.

Y enloqueció. Cometió el peor crimen imaginable, se enamoró de su protegida. Desde entonces ya no es más un custodio. Ahora se le conoce como Lucifer, el ángel caído… por el amor a una mujer.



Eduardo